La instalación de cualquier tipo de sistema de climatización está sujeta a unas instrucciones fijadas por las administraciones para asegurar la seguridad y el buen funcionamiento de estos aparatos.
La normativa del aire acondicionado regula tanto cómo deben funcionar los sistemas como qué tipo de aparatos y medidas de seguridad se deben llevar a cabo en su instalación. Esto afecta tanto a los hogares como, sobre todo, a espacios abiertos al público como pueden ser las oficinas o los espacios de venta de bienes y servicios.
Es importante conocer la normativa de instalación de aire acondicionado para que el montaje, sobre todo en ambientes industriales, no ponga en riesgo a clientes o trabajadores.
Qué normativa regula la instalación de aire acondicionado
La principal normativa que hay que tener en cuenta a la hora de instalar un aparato de aire acondicionado es el Código Técnico de Edificación. En este documento se indican pautas sobre el ahorro energético, el impacto ambiental y el impacto en la imagen de los edificios.
Esto último se debe tener en cuenta sobre todo en el caso de inmuebles en los que habitan distintos vecinos o existen varias empresas o comercios: para instalar las máquinas externas del aire acondicionado en azotea hay una normativa como puede ser la Ley de la Propiedad Horizontal.
En ella se suele registrar la forma estética y segura de colocar los motores externos para que no afecte negativamente a la estructura.
Sin duda, la Ley de Propiedad Horizontal es la normativa que más asuntos regula las instalaciones de aires acondicionados, por esto es importante revisar antes de tomar decisiones sobre la colocación del sistema de climatización.
Requisitos a cumplir y permisos necesarios para su instalación
¿Qué requisitos exigen las normativas en cuanto a la instalación del aire acondicionado? Básicamente todas las leyes y medidas a cumplir con los aires acondicionados están relacionadas con el compromiso ecológico y el respeto a las estructuras y a la estética de los vecinos.
Concretando, lo importante es que la instalación no genere ruidos molestos que puedan importunar a los vecinos, no colocar las unidades externas en lugares de paso que puedan molestar y, sobre todo, asegurar las máquinas para que no puedan producirse accidentes graves.
En cuanto a los criterios ecológicos, la normativa anima a buscar máquinas con una huella ecológica de A o superiores, puesto que son los sistemas que más responsables son con el medio ambiente y generan un importante ahorro en la factura de la luz.
Por último, no hay que olvidar el detalle de que los distintos municipios y comunidades autónomas pueden imponer reglas y medidas extra en la normativa del aire acondicionado. Revisar todo esto y ponerlo en manos de instaladores profesionales es la mejor forma de asegurarse de que todo está bajo control y la colocación es correcta.
Otra de las formas que hay de no vulnerar la normativa es instalar aires acondicionados portátiles. Estos aparatos no precisan de grandes infraestructuras, por lo que no rigen por la normativa de instalación de aire acondicionado y aseguran la climatización de grandes espacios sin problemas, lo que puede ser una solución ideal.
