La cocina es uno de los lugares que más difícil resulta limpiar: la acumulación de grasa, manchas y humedad es una combinación fatal para los azulejos, que se impregnan de esa mezcla y tienen a lucir descoloridos y con poco atractivo.
La cosa se complica si se trata de una cocina industrial. En estos espacios el nivel de trabajo se eleva por varias horas sobre una cocina doméstica. Esto se traduce en que se mancha más y hay más grasa, con lo que los trabajos de limpieza y adecuación de los azulejos se hace más difícil.
Sin embargo, existen materiales y utensilios que ayudan a limpiar azulejos de cocina para que queden brillantes, incluso si se trata de limpiar azulejos de cocinas industriales.
Materiales y utensilios para limpiar azulejos de cocina industrial
Evidentemente, por nivel de actividad, dimensiones y grado de suciedad, limpiar una cocina industrial no puede hacerse con las mismas técnicas, aparatos y productos que la cocina de casa.
En este caso, conviene que la limpieza sea rápida y efectiva, por lo que es muy útil aplicar el uso de aparatos especialmente pensados para la limpieza de espacios industriales.
Un ejemplo de ello es la máquina generadora de vapor. Estos dispositivos eliminan hasta la suciedad más incrustada gracias a un potente y continuo flujo de vapor de agua. Además de arrancar cualquier rastro de grasa, lo bueno de las generadoras de vapor es que no utilizan más que agua. Al no llevar rastro de químicos, resulta ideal para aplicar en lugares en los que luego se trata con alimentos.
También se deben utilizar productos especialmente indicados para la limpieza de los azulejos de la cocina. Existen, de hecho, productos para cocina como el Masslimp H-331 de Mator, un detergente desinfectante de superficies que se utiliza a diario en cientos de cocinas profesionales del país.
Cómo limpiar los azulejos para que brillen
Respecto al estado concreto de los azulejos, ¿cómo limpiar los azulejos de la cocina para que queden brillantes?
Se pueden limpiar los azulejos para que queden brillantes y sin necesidad de utilizar químicos que puedan resultar negativos para el trabajo en la cocina.
Lo principal es utilizar sobre ellos, de manera habitual, la máquina generadora de vapor. Una vez eliminados todos los rastros de grasa y suciedad, una buena opción es aplicar bicarbonato y sal para terminar de eliminar cualquier resto acumulado y devolver a los azulejos a su estado original.
Ambos componentes se mezclan con agua para crear una pasta que se aplica directamente sobre los azulejos. Conviene dejar secar para retirar con ayuda de un trapo mojado. Secar con papel y listo.
También hay quien apuesta por el uso del vinagre blanco rebajado en agua. El profesor y los resultados son similares a los de la técnica anterior.
Por último, de manera muy controlada en ambientes como cocinas profesionales, se puede aplicar líquido limpiacristales. Siempre con papel, pues los resultados son mucho mejores, es posible dar una pasada con este producto para sacar más brillo todavía a los azulejos de la cocina.
