Las manchas de óxido son unas de las más complejas de retirar de cualquier superficie. En los espacios de trabajo como ciertas industrias es muy habitual que algunas piezas metálicas acaben manchando el suelo con óxido, lo que supone un problema porque el pavimento se va deteriorando poco a poco.
Hay que destacar que este tipo de manchas no sale con pasar una fregona o restregar con una bayeta húmeda. Aquellos que saben cómo quitar óxido del suelo saben que es necesario aplicar métodos más agresivos para devolver el pavimento a su estado actual.
¿Cómo quitar el óxido? ¿Qué debo hacer para eliminar la mancha sin deteriorar el suelo? ¿Hay solución para este problema? La respuesta es sí, y aunque limpiar óxido no sea lo más fácil del mundo, existen métodos bastante efectivos.
Qué necesitas para quitar el óxido
Una de las mejores formas para responder a la pregunta sobre cómo quitar el óxido es con la ayuda de aparatos hidrolimpiadores.
¿De qué se trata? Son máquinas de limpieza industrial y doméstica que trabajan gracias a la expulsión de un chorro de agua a presión. Nada más, la hidrolimpiadora cuenta con un depósito donde se vierte agua, que luego sale por una manguera a la temperatura y presión indicada por el propietario.
Estas máquinas son muy útiles para tareas de limpieza complejas tanto en exteriores como en espacios del tipo nave industrial o centro de trabajo. Generalmente se usan en la limpieza de moho, pegotes de cemento, óxido y cualquier otro tipo de mancha o acumulación de suciedad difícil de eliminar.
Cómo quitar manchas de óxido del suelo: algunos trucos
Al uso de la hidrolimpiadora se pueden sumar algunos trucos o pequeños consejos muy útiles para eliminar las manchas de óxido sin problema.
Ácido oxálico
El ácido oxálico es uno de los mejores aliados para aquellos que se preguntan cómo eliminar las manchas de óxido del suelo. Este producto, de venta en droguerías, se aplica directamente sobre el suelo junto con un poco de agua templada. Tras actuar durante unos minutos, esta mezcla se retira y la mancha de óxido se puede eliminar con varias pasadas con una fregona de microfibra.
Bicarbonato
La mezcla de bicarbonato y vinagre blanco también puede ser útil en estos casos. No obstante, es conveniente valorar la dureza y resistencia del suelo para evitar que se pueda ver perjudicado con este proceso de limpieza del óxido.
Papel de aluminio
El papel de aluminio es otra opción barata, rápida e interesante para eliminar manchas de óxido en el suelo.
Para este proceso será necesaria una mezcla de agua y vinagre. Una vez preparado esto, hay que hacer una bola con papel de plata y frotar el suelo donde esté la mancha. Se puede comprobar cómo poco a poco va saliendo el óxido que afea el pavimento. Se termina con una bayeta humedecida en la mezcla y se friega con normalidad.
Quitar el óxido del suelo no se convierte en un proceso complejo e imposible gracias a la ayuda de todos estos trucos y al uso de la hidrolimpiadora, que es la más efectiva de todas las fórmulas para eliminar manchas complejas como estas.
