El lavavajillas es uno de los electrodomésticos más usados que nos facilitan la vida diaria. Imprescindibles en restaurantes, bares, y hogares de todo tipo, son utilizados todos los días realizando sus labores eficaces de limpieza. Pero para que puedan realizar bien su función, es necesario realizar ciertas labores de mantenimiento y saber cómo limpiar el lavavajillas correctamente.
El realizar una buena limpieza de lavavajillas no solo implicará mejorar su rendimiento, sino que además, aumentará su vida útil y contribuirá a ahorrar recursos naturales como el agua y la energía.
Pasos para limpiar el lavavajillas
La limpieza del lavavajillas debería ser un proceso rutinario para mantenerlo en buenas condiciones y ayudarlo a realizar bien su tarea. Para ello, un buen método para limpiar el lavavajillas con vinagre blanco podría ser el siguiente:
- Con una bayeta empapada en vinagre limpiar la zona de la puerta y las gomas que hay en ella.
- Sacar el filtro, limpiarlo y volverlo a colocar.
- Encender el lavavajillas con un programa alto en temperatura.
- A los 12 minutos pararlo, echar un vaso de vinagre y ponerlo en funcionamiento otra vez.
- Acabar el ciclo de limpieza.
Para reforzar esta limpieza, puede añadirse bicarbonato espolvoreando en la base interior y poniendo en funcionamiento un ciclo corto de limpieza a alta temperatura. De esta manera refrescará el olor del lavavajillas y contribuirá a limpiar la suciedad más incrustada.
Trucos para mantener el lavavajillas en buen estado
Una vez que se sabe cómo limpiar un lavavajillas, hay ciertos aspectos que pueden llevarse a cabo para mantenerlo en buen estado y aumentar su vida útil:
- Antes de introducir los objetos, es conveniente retirar los restos de comida con una servilleta de papel. Pese a lo que contrariamente se hace, aclarar los platos no suele ser una buena idea porque los lavavajillas modernos regulan la cantidad de agua en función a la suciedad que detectan. Esto puede hacer que la máquina los detecte como limpios y no realice bien el proceso de limpieza.
- La puerta debería de estar siempre abierta, al menos con una rendija. Facilitar la entrada de aire hará que la máquina esté seca por dentro y evitará la aparición de moho. Además es un gran remedio para que no se concentren los malos olores.
- Eliminar de vez en cuando la porquería acumulada en la goma del marco de la puerta. Bastaría con pasar de vez en cuando una bayeta humedecida con algo de detergente.
- Mantener limpio el filtro ayudará a evitar obstrucciones y malos olores en el lavavajillas. Para ello, con desmontarlo de vez en cuando y pasarlo por el grifo mientras se frota con un cepillo es suficiente.
- Limpiar regularmente las aspas.
- Echar productos específicos de vez en cuando para evitar las acumulaciones de cal y obstrucciones en los conductos internos.
- Utilizar productos de primer nivel. Si es un lavavajillas para uso industrial, es conveniente utilizar detergentes que ayuden a quitar la grasa localizada como por ejemplo el Determator.
Limpiar un lavavajillas es una tarea fácil y que requiere poco tiempo. Empleando los consejos citados, no solo tendrá mayor eficacia a la hora de limpiar los platos, sino que además con unos pequeños cuidados evitaremos su mal funcionamiento.