El moho se produce a partir de la presencia de hongos, de manera que es importante que comencemos valorando las medidas preventivas y actuaciones directas con las que quitar el moho por completo de forma efectiva, minimizando así los riesgos para la salud y el deterioro que causa en muebles, paredes y suelos.
Por qué sale el moho
Presencia de humedad elevada
Una humedad elevada en el entorno es el principal causante de la aparición del moho.
Hay que tener en cuenta que en espacios con poca ventilación existe una mayor tendencia a la humedad, como ocurre en zonas como el baño y otras instalaciones donde utilizamos agua con frecuencia.
Además, hay otras dos razones para que aumente la humedad:
Agua estancada o filtrada
Las aguas estancadas o zonas en las que hay filtraciones durante las lluvias, son lugares más húmedos y, por tanto, es más probable que acaben desarrollando moho.
Exceso de condensación
Debemos destacar el exceso de condensación, otra de las razones por las que se puede acumular humedad y, por tanto, dar lugar a su aparición.
Restos de polvo y alimentos con moho
Casi sin que nos demos cuenta, poco a poco se van acumulando restos de polvo e incluso de alimentos a través de los cuales se produce el moho.
Cualquier rincón puede albergar una pequeña cantidad de materia que, unida a la humedad elevada, acabe desembocando en la aparición de moho.
Cómo quitar el moho fácilmente
Es muy importante que aprendamos cómo quitar el moho de la pared y del resto de elementos de las instalaciones. En este sentido vamos a actuar de dos formas: con medidas preventivas que eviten su aparición y con medidas correctoras con las que acabaremos con el moho que ya se ha desarrollado, utilizando en ambos casos maquinaria de limpieza profesional.
Mantener la limpieza de suelos, paredes, moquetas y elementos
El primer consejo para prevenir y acabar con el moho es la limpieza.
Es muy importante que limpiemos adecuadamente tanto los suelos como las paredes y cualquier elemento que pueda acumular polvo o restos orgánicos.
En un entorno limpio y bien higienizado, la posibilidad de que aparezca moho es mínima, y para ello os recomendamos la utilización de herramientas como son los aspiradores o las hidrolimpiadoras, que ayudan a acabar con prácticamente cualquier tipo de suciedad. Tampoco deben olvidarse los limpiamoquetas, siempre que sean necesarios, esenciales para retirar el polvo y restos acumulados en zonas más complicadas debido a los tejidos.
Para eliminar el moho de superficies ya afectadas, es esencial utilizar productos químicos que acaben con los hongos y eviten su proliferación.
Instalación de deshumidificadores
Comentamos al principio que una de las principales razones por las que se desarrolla el moho es precisamente por un exceso de humedad, algo que es bastante habitual que afecte a naves industriales y grandes edificaciones como residencias u hoteles.
Invertir en deshumidificadores es una de las medidas más acertadas para prevenir la aparición de moho. Existen modelos profesionales y adaptados a los diferentes espacios que queramos mantener en perfectas condiciones.
Mejorar la ventilación
Para terminar vamos a mejorar la ventilación, con lo que conseguiremos reducir la humedad y, en definitiva, impediremos que se desarrollen microorganismos y hongos.
En este caso, podemos hacer uso de ventiladores semiindustriales con los que garanticemos una ventilación constante en cualquier espacio.
Teniendo en cuenta todas estas recomendaciones, además de aprender cómo quitar el moho de las paredes, suelos, techos y del resto de elementos del entorno, también vamos a conseguir establecer medidas con las que evitaremos su aparición, reduciendo así los riesgos tanto para la salud como para la integridad de las instalaciones.