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El brillo y ese color rojizo dorado que tiene el cobre son las características que hacen que sea uno de los metales más usados en fabricación de objetos. Pero esa belleza que tiene, puede quedar empañada por la facilidad con la que se ensucia debido a su contacto con el aire y la humedad. Por ello, el saber cómo limpiar el cobre, es un aspecto fundamental si se quiere devolver a una pieza su color y brillo original.

Qué necesitas para limpiar cobre

Hay productos específicos de marcas reputadas en limpieza, como los productos químicos Mator, que pueden dejar tus piezas de cobre limpias y perfectas como el primer día. Pero algunas veces, no tenemos la ocasión de tenerlas en casa, y el salir a comprarlas puede ser tarea difícil. Pero no hay por que desesperarse, hay varios truquitos caseros para limpiar el cobre con ingredientes que pueden encontrarse en la mayoría de las casas.

Para ello, lo único que hay que hacer es preparar una serie de mezclas con ingredientes tan variados como el limón, el vinagre, la sal, el bicarbonato e incluso ketchup.

Para aplicar cualquiera de estas mezclas a tus objetos de cobre, y poder de esta manera limpiarlos, necesitarás tan solo un trapo.

Cómo limpiar cobre fácilmente

Para saber cómo limpiar el cobre con cualquiera de las mezclas caseras que vamos a proponerte, lo único que hay que saber es la composición de la mezcla y cómo proceder a su limpieza.

El procedimiento es común a todas ellas: Aplicar un trapo en la mezcla y raspar la superficie sucia.

Antes de proceder a la limpieza, hay un par de cosas que hay que tener en cuenta:

  1. Comprobar si la pieza de cobre tiene un recubrimiento. Para ello, lo único que hay que hacer es pasar un algodón mojado en bicarbonato y vinagre. Si la mancha se quita fácilmente, significa que el objeto está recubierto, y podrás usar cualquier tipo de producto para su limpieza.
  2. En caso contrario, hay que usar un trapo con cualquiera de las mezclas recomendadas. Para saber si la mezcla es válida para limpiar el cobre, bastará con frotar una pequeña porción de su superficie, y si se limpia fácilmente, podremos proceder a limpiar la pieza entera.

Las mezclas que han mostrado una gran eficiencia a la hora de limpiar cobre son:

  • Vinagre blanco y sal: 1 cucharada de cada elemento.
  • Bicarbonato: puede aplicarse directamente o hacer una mezcla con jugo de limón.
  • Sal, harina y vinagre: 1 cucharada de cada.
  • Ketchup: aplicarlo directamente sobre el cobre.
  • Sal y limón: cortar un limón y pasarlo sobre la mancha. A continuación poner un poquito de sal y frotar con el trapo, la sal hará que se vaya desprendiendo la suciedad fácilmente.

Todos estos métodos puedes usarlos con un cobre que no esté muy sucio. Pero a veces, el cobre puede presentar un color verduzco ocasionado por la corrosión, que si no se limpia, puede acabar con la superficie del metal.

 

Para limpiar el cobre muy sucio, puedes emplear los métodos descritos anteriormente, o realizar algún tipo de variación en sus mezclas, como añadir un poco de harina. Hay productos especiales, como el ácido muriático, que están especialmente indicados en este tipo de casos. Como ves, es muy sencillo saber cómo limpiar el cobre y volver a dejar tus piezas tan bellas y coloridas como siempre.

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