Una de las problemáticas más habituales que presentan las instalaciones de aire acondicionado es que, cuando están funcionando, el aparato se llena de hielo en sus conductos o en la propia consola interior. Un aire acondicionado con hielo no es un aparato que enfría muy bien, sino un gran problema que hay que solucionar cuanto antes.
Ser conscientes de esta situación y no ponerle remedio lo más rápido posible puede traducirse en una rotura del sistema. Esto, en caso de grandes montajes en espacios de trabajo como oficinas o naves industriales, puede convertirse en un gran gasto y un problema debido a la necesidad de instalar un nuevo dispositivo de climatización.
¿Pero por qué hay en el aire acondicionado hielo? ¿Qué daños puede causar esta situación y cómo evitarlo? Conocer bien cómo se produce esta situación y todas las repercusiones que puede tener es imprescindible para entender la urgencia de solucionarlo.
Por qué se congela un aparato de aire acondicionado
Lo primero que hay que saber es que el aire acondicionado con hielo no es algo excepcional, sino que es una de las averías más comunes. Esto quiere decir que tiene una solución rápida y sencilla, si se toman las decisiones correctas a tiempo.
La causa principal de esta mala combinación de aire acondicionado y hielo tiene su origen en unos filtros sucios. Al no poder hacer bien su trabajo se acumulan gotas de agua que, con la baja temperatura, se congelan y acaban dando la cara.
También suele ocurrir si el intercambiador (interior o exterior) tiene demasiada suciedad acumulada. El problema es básicamente similar al anterior: la máquina no puede continuar con su flujo de aire habitual y termina por congelarse.
Otros detonantes es que el ventilador interior no funcione de la manera correcta, que la máquina haya sufrido un escape de gas refrigerante o la unidad exterior también presente un mal estado que impida su trabajo óptimo.
Hay que revisar, por último, la evaporadora del aire acondicionado, ya que en esta zona donde se da lugar el proceso de extracción de aire caliente de la estancia también se pueden hacer acumulaciones de hielo.
Qué daños o inconvenientes puede causar
Los daños que pueden traducirse de un aire acondicionado con hielo son muchos. El principal es que dejará de funcionar tan bien como lo ha estado haciendo hasta el momento: en centros de trabajo una mala climatización afecta directamente a la capacidad de concentración y eficiencia de los empleados.
Además, las consolas interiores pueden tirar agua que, en caso de almacenes o similares, puede causar daños en mercancías, muebles, etc.
Por último, lo peor que puede ocurrir en un aire acondicionado con hielo es que se rompa y haya que invertir una gran partida en repararlo o, peor todavía, en cambiarlo por uno nuevo.
Cómo evitar que se congele un aparato de aire acondicionado
Una correcta limpieza y mantenimiento habituales son la mejor forma de disponer de un aparato de aire acondicionado en plena forma y sin este tipo de problemas.
Los filtros del aire acondicionado —ya sea una máquina fija o un aparato portátil— se deben revisar y adecuar cada cierto tiempo. Unos filtros sucios suelen ser el origen de la mayoría de roturas del aire acondicionado.
El resto de piezas pueden ser revisadas en plazos mayores y siempre deben estar limpias. El proceso de limpieza se puede realizar con un trapo húmedo y limpiadores químicos recomendados para este tipo de aparatos.
Si pese a ello se observa el aire acondicionado con hielo, será recomendable llamar al servicio técnico para que puedan revisar la situación y poner fin al problema.
Estas son las principales situaciones, soluciones y modos de actuación ante un aire acondicionado con hielo. Saber dónde tiene su origen el problema y qué hacer para poder solventarlo alarga la vida útil de los aparatos y mejora su eficiencia en un alto porcentaje de los casos.
