Los niveles bajos de humedad brindan un escenario ideal para la aparición de determinados virus y enfermedades respiratorias, por ese motivo es tan importante mantenerlos estables. Sin duda alguna, la falta de humedad podría afectar negativamente a nuestra salud.
Es muy importante mantener los niveles de humedad dentro de un rango específico. Partiendo de la base de que este parámetro es uno de los factores del medio ambiente que más afecta a nuestro organismo, aunque muchas personas ni siquiera sean conscientes de ello.
Qué porcentaje de humedad ambiental es ideal
Los expertos coinciden en que la temperatura más confortable para el ser humano debe estar entre 18 °C y 20 °C. Un concepto asociado al de la humedad relativa. ¿Qué porcentaje de humedad es normal? La humedad ambiental ideal debe estar entre el 50 y 60 % y se considera aceptable entre un 40 y un 70 %.
Recordamos que un ambiente demasiado húmedo favorece el desarrollo de hongos y gérmenes nocivos. Asimismo, cabe destacar que cada persona contribuye con su respiración a aumentar la humedad. Principalmente, dependerá de su peso, la edad, alimentación o actividad que realice.
No es nada nuevo que el hombre inspire oxígeno y desprenda anhídrido carbónico y vapor de agua. Atendiendo a la humedad recomendada conseguiremos unos resultados óptimos para nuestro organismo.
Consecuencias de la falta de humedad ambiental
Tanto en los meses de invierno como durante el verano podemos encontrarnos con una humedad relativa baja. En la mayoría de los casos, se debe a las calefacciones y a las temperaturas frías del invierno que hacen que el aire se seque mucho más rápido.
Normalmente, esta falta de humedad en el ambiente trae consigo todo tipo de problemas como la piel seca, picores en los ojos o la irritación en las mucosas respiratorias. Inclusive, muchos virus que conviven en el entorno se hacen más fuertes y resistentes cuando la humedad es baja. Por esa razón, se pueden contraer fuertes infecciones, algo mucho más peligroso en los bebés y los niños.
Cómo podemos solucionarlo
Dicho todo esto, es momento de buscar soluciones. Lo recomendable es instalar aparatos humidificadores que nos ayuden a mejorar y regular la humedad ambiental de cada estancia.
Por otro lado, hay que resaltar que existen sistemas capaces de controlar la temperatura y la humedad ambiente, pero será necesario mantener una temperatura correcta y elegir adecuadamente el foco de calor.
La necesidad de humidificar el ambiente se hace necesaria por las siguientes razones:
- Por la presencia de materiales higroscópicos.
- Por la electricidad estática.
- La importancia del bienestar y comodidad.
Si bien es cierto que en muchas áreas no es extraño ver una humedad que supere el 80 % durante los meses de verano, en otoño podemos observar niveles de humedad muy bajos: incluso pueden rondar el 20 %.
En resumen, la falta de humedad ambiental en una vivienda u oficina puede desarrollar la proliferación de gérmenes que afectarán perjudicialmente a nuestra salud. Por ese motivo, se recomienda un porcentaje adecuado y temperatura idónea para que el aire que respiramos sea de máxima calidad.
