¿Es recomendable dormir con la calefacción encendida? Si así fuera, ¿cuál es la temperatura ideal de la calefacción para dormir? Estas y otras preguntas siguen siendo muy normales y el debate está servido. Dormir bien es fundamental para nuestro descanso y bienestar y la temperatura de la estancia influye en ello.
Durante la noche, nuestra temperatura corporal desciende y si el calor externo aumenta, por lo que podría dar lugar a un desequilibrio térmico. Como consecuencia de esto, nos podremos despertar, lo que determinaría la calidad del sueño. A la mañana siguiente nos podríamos sentir más incómodos y con la sensación de agotamiento y falta de energía.
Cuál es la temperatura ideal de la calefacción para dormir
Si decides utilizar el aparato de calefacción durante el sueño nocturno, ten en cuenta que la temperatura ideal para dormir en invierno está sobre los 18 y 22 grados. Debes saber que cuanto más alta es la temperatura, más se reseca el ambiente, y es normal sentir sequedad en la garganta al dormir. Sin duda alguna, esto podría generar molestias y problemas de salud como catarros y gripes.
Por ese motivo, hay que tener en cuenta cuál es la temperatura ideal de la calefacción para evitar dañar también nuestros ojos, ya que se podría generar conjuntivitis, o resecar la piel y producir descamación y picor.
Por lo tanto, hay que cuidar que la temperatura de la calefacción en invierno sea la idónea para garantizarnos un sueño realmente saludable porque desde una perspectiva científica se ha comprobado que incide en la calidad de las horas dormidas.
¿Es aconsejable dormir con la calefacción?
Es indiscutible que en invierno debemos regular la temperatura corporal, tanto si decidimos usar la calefacción para conseguir la temperatura ambiente ideal o desterramos esta idea, recomendamos estos consejos para mejorar el sueño.
- Utilizar ropa preferentemente cómoda y de algodón que permita la absorción de la transpiración.
- Usar mejor el edredón que la manta porque una funda rellena de plumón o un material como el poliéster nos ayuda a mantener estable la temperatura.
- Intentar apagar la calefacción antes de dormir y haber sido previsores al mantener la estancia caldeada horas antes.
- Finalmente, si lo que decides es usar la calefacción durante el horario nocturno debes programarla de forma que no supere los 22 grados. Incluso se podría contemplar la opción de su desactivación durante la madrugada para mantener la temperatura de la calefacción en invierno.
En primer lugar, cabe señalar que la calefacción es una necesidad en determinados lugares, donde hace mucho frío y baja la temperatura nocturna, si se quiere un mínimo de bienestar y una óptima temperatura para dormir. Si se utiliza correctamente, puede ofrecer el confort que se necesita.
En segundo lugar, este sistema es recomendable para prescindir de varias capas de ropa de cama. Por ese motivo, si pones la calefacción a una temperatura media, no vas a notar una gran diferencia.
En definitiva, hay que saber sacar el máximo partido a nuestro aparato de calefacción y hacer un uso correcto en el horario nocturno, durante los meses más fríos, que nos permita conseguir la mejor temperatura mientras dormimos.
